Durante años he tratado de enseñar algo de un rico material sobre plantas mágicas, conciencia, milagros, realidades y estados de conciencia, sin olvidar bioenergética, sicología transpersonal y chamanismo.
Es curioso como se afectan algunas vidas, pero lo que me llama la reflexión hoy es una palabra: Merecimiento.
Cuento esto pensando en algunos miembros y participantes, ya lejanos,que realizaron durante casi 5 años talleres de crecimiento y exploración emocional, Milagros, Bioenergética, y un largo etc. Pero seguían iguales, convencidos que la fatalidad los cubría.
Tiempo después los veo, haciendo talleres que son el mismo contenido con nombres diferentes y puntos filosóficos diferentes, aderezados con religión, culpa y control.Son las mismas técnicas, y aunque siguen básicamente en el mismo lío, se han transformado en aceptadores máximo de la "fatalidad de Señor", en quien han desplazado y colocado toda responsabilidad de su vida.
La única diferencia es que ahora toman en serio las técnicas pues han pagado, y pagan cada sesión sin falta, no desdeñan las herramientas pues son caras y "únicas". O explican sus vidas con la voluntad del Señor y el pecado como forma resumida de expresar su imposibilidad de cambiar y ser felices.

Al verlos creo que nunca entendieron un amanecer en meditación, pues eso es gratis. No entraron en contacto consigo mismo y no entendieron la responsabilidad de vivir y ser feliz. Y aunque no compensa mis faltas, creo que entiend lo de las perlas y cochinos. O será que los talleres gratis sin importar cuántas veces lo repitiera, son arrojados al cesto de basura.
Así que estés donde esté, trata de aplicar la técnica de merecimiento positivo, ser feliz y buscar a Dios sin importar su nombre, ese es el secreto por el cual pagamos en algunos talleres. Recordando que sin tí cualquier Dioso Diosa está incompleto, eres parte de lo divino.

Y por favor nunca le digas a las creencia de alguien "Respeto ESo", pues "Eso" trasciende mucho más allá de la conciencia limitada de nuestra percepción normal.

Sé Feliz, busca encontrarte y sé responsable de tus acciones. Olvida la culpa y camina con tu Dios.